El próximo jueves se tratará el proyecto para reformar el organigrama funcional del municipio, donde el Ejecutivo pretende desarmar el Instituto Municipal de Agua e Infraestructura y derivar sus poderes a otras secretarías.
Las funciones del IMAI serían transferidas a las secretarías de Planeamiento y Desarrollo; y de Servicios públicos de acuerdo al próximo organigrama, ya que al contar con un mayor control de uso y distribución del agua no sería necesaria la intervención de un ente desconcentrado de la administración municipal.