Fue poco después de las 22, en una vivienda de avenida Keidel, casi Chos Malal. Según explicó la víctima, estaba en su casa cuando varios delincuentes cortaron la electricidad y se metieron a la vivienda.
A pesar del enorme susto que tenía, la mujer consiguió encerrarse en la parte alta de la casa y desde allí advertir a los ladrones de su presencia y de que había llamado a la policía.
Tras varios minutos de zozobra y miedo, los ladrones huyeron sin dejar rastro y sin robar. La policía investiga lo ocurrido porque hay cámaras en la zona, ya que es muy transitada y comercial.
En principio, los delincuentes habrían supuesto que no había nadie en la casa y pretendían robar los electrodomésticos y cosas de valor. La mujer resultó ilesa, aunque estaba muy asustada.








