El juez de Garantías, Ignacio Pombo, aprobó que los dos acusados por el doble crimen de Junior Riquelme y Nicolás Piovesán continúen en prisión preventiva por dos meses. Mientras tanto, la investigación sigue su curso.
Ayer, se llevó a cabo una audiencia en la Oficina Judicial Cutral Co, y a pedido del asistente letrado Federico Cúneo.
Se solicitó que Carlos De la Vega y Juan José Canihuan los dos acusados de haber asesinado a Junior Riquelme y Nicolás Piovesan, en el barrio Nehuen Che de Cutral Co, continúen con prisión preventiva teniendo en cuenta que se mantienen los riesgos procesales.
El representante de la fiscalía requirió la prórroga por cuatro meses de la prisión preventiva impuesta a ambos acusados en agosto pasado, ya que la medida vence la próxima semana. El pedido fue acompañado por el abogado y la abogada querellante que representan a una de las víctimas.
Cúneo sostuvo que persiste el riesgo de peligro de entorpecimiento de la investigación de parte de los acusados, razón por la cual la medida de coerción tiene que prorrogarse. Sobre esto último, remarcó que tras los homicidios ocultaron un auto en otro domicilio y que aún no se logró encontrar el arma empleada.
El juez Pombo lo avaló por el requerimiento aunque por un plazo menor y fijó la extensión en dos meses.
De acuerdo a la investigación del MPF y la Policía provincial, el hecho se dio en el contexto de un conflicto entre bandas antagónicas. Por un lado, las víctimas Nicolás Piovesan y Junior Riquelme; y por el otro, los imputados De la Vega y Canihuan.
Qué ocurrió
El 23 de agosto pasado, durante la tarde, Canihuan se desplazó en un automóvil dorado hasta la casa del grupo adversario y efectuó disparos de arma de fuego, sin causar víctimas. En represalia, Piovesan y Riquelme hicieron lo mismo, también sin herir a nadie.
Tres días más tarde, el martes 26 de agosto a las 2 de la madrugada, Piovesan conducía una motocicleta junto a Riquelme como acompañante, cuando fueron perseguidos por un auto color negro conducido por De la Vega y en el que también se trasladaba Canihuan.
En ese contexto, los imputados efectuaron múltiples disparos, que provocaron la muerte de ambos jóvenes: sin poder defenderse, Piovesan recibió tres impactos en la espalda que atravesaron órganos vitales, mientras que Riquelme sufrió dos heridas de arma de fuego, una de ellas en el cuello, de carácter mortal. Luego del hecho, los acusados huyeron del lugar.
Ambos están imputados por doble homicidio agravado por el uso de arma de fuego y por mediar alevosía, en calidad de coautores.








