La cachorra entró a un pasillo angosto entre dos paredones y no pudo volver a salir. Sus dueños y los bomberos voluntarios de la ciudad lograron liberarla después de casi una hora.
Ocurrió ayer al mediodía, minutos después de las 13, en el barrio Altos del Sur de Plaza Huincul. Según se supo, la perra ingresó a un pequeño pasillo de la medianera, entre dos paredes, pero a medida que avanzaba el espacio se volvía más pequeño.
Sus dueños intentaron sujetarla con sogas para sacarla del lugar, pero les resultó imposible, por lo que terminaron acudiendo a los bomberos, que colaboraron en la maniobra.
Después de casi una hora de trabajo, lograron calmar al animal, levantarla y sacarla por el mismo espacio por el que había ingresado.
Finalmente, los duelos de la perra hicieron público el agradecimiento a los bomberos, por medio de las redes sociales.
