En pocos días, el nombre de Cristián Flores se hizo conocido por su participación en la banda de estafas que compraba celulares desde la cárcel y por la fuga de la Unidad de Detención, donde cumple con una condena por robo calificado.
Como muchos otros jóvenes del barrio Belgrano de Cutral Co, Cristián Flores integraba la banda de Los Paisanos junto a su hermano Lucas (asesinado en 2017). Entre 2014 y 2015 protagonizaron una serie de robos violentos y entraderas en los barrios del oeste.
Fue por uno de estos casos que Cristian terminó enjuiciado y condenado. Precisamente en la madrugada del 15 de febrero de 2015 y acompañado por dos menores de edad, tumbaron la puerta de una casa de calle 13 de Diciembre y perpetraron un violento robo.
La familia dormía cuando los 3 entraron y los despertaron con cinco disparos de armas de fuego. El padre se defendió con un palo con el que golpeó a Cristián Flores en la cabeza, pero no pudo evitar que se llevaran un televisor y un perro, mascota del hogar.
Tras una investigación, la justicia dio con Flores que terminó condenado a 8 años de prisión por robo agravado por el uso de arma idónea y la participación de menores de edad.
Actualmente purga la pena en la Unidad de Detención 22 de Cutral Co y la semana pasada fue noticia por comandar desde dentro de la cárcel una banda que operaba con datos de clientes de Movistar para la compra de teléfonos de alta gama.
Por el caso allanaron su celda y dieron con teléfonos celulares y cuadernos donde archivan la información de las víctimas.
Pese a esa situación, Flores no perdió los beneficios que tenía dentro del penal y en la tarde del lunes los guardias le permitieron la salida al patio para realizar una llamada telefónica.
Paso casi 24 horas en calidad de prófugo, hasta que lo capturaron en la mañana del martes, mientras merodeaba una zona comercial de la avenida Keidel Plaza Huincul junto a un menor. Si bien estaba desarmado, sospechan que se encontraba con intenciones delictivas.