“Al cumplirse 100 años del descubrimiento del petróleo en Plaza Huincul, quiero recordar a mi abuelo José Potenzoni y compartir su historia, porque él fue uno de los pioneros que trabajaron en el Pozo N° 1”.
“Nacido en Reggio Calabria, Italia a los catorce años emigró solo a la Argentina para vivir con sus tíos que lo esperaban en Buenos Aires, desde ya debió trabajar desde chico en diferentes ocupaciones”.
“Se casó con Carmela Fortunato, descendiente de italianos. Sus dos primeras hijas las tuvieron en Buenos Aires: María Magdalena y Magdalena”.
“Como trabajador en la Dirección General de Minas, Geología e Hidrología de la Nación fue destinado a venir a trabajar a Plaza Huincul -en la perforadora Fauch bautizada “Patria” y dirigida por el Ingeniero (Enrique) Cánepa-, arribando con su familia en noviembre de 1915”.
“Como todo traslado implica preparar lo que se va a utilizar para vivir en el nuevo destino, mi abuela incorporó entre los enseres elementos de limpieza: como escobillones, trapos de piso, pero él para no causarle desilusión no le aclaró que no iban a ser necesarios. Aquí estaba todo por hacer, solo los esperaba la naturaleza en estado virgen, la inmensidad del desierto con su vegetación achaparrada, el viento intenso, la falta de agua, la estación de trenes más cercana era la de Challacó, la Aguada de la Pasto Verde, todo despoblado”.
“Por ello, en un primer tiempo debieron vivir en carpas, en la parte inferior de la roca cercana al Pozo N° 1. Después la empresa construyó galpones de chapa destinados a viviendas del personal, en el lugar donde después funcionó el cine Petroleum”.
“En junio de 1916 su trabajo era de foguista del Pozo N° 1”.
“También al igual que ahora, los trabajadores sufrían accidentes, por ejemplo mi abuelo se cayó de la torre, fracturándose una pierna”.
“La familia fue creciendo, nacieron cuatro hijos más: Catalina – mi madre quien se casó con Jaime Alberto Cacciamani; Antonio Dominicio –apodado Tony-; José – de apodo Pepe- y Carmen, quien vive en San Martín de los Andes”.
“Como YPF edificó casas en Campamento Central, se trasladaron a la Casa N° 655, la misma en la actualidad mantiene la misma numeración correspondiente a la calle Juan Pablo Marín.
Trabajó en YPF hasta que se jubiló”.
“El trabajo de perforación para extraer del subsuelo “El Oro Negro”, demandó de un trabajo sacrificado, pero él como todos los trabajadores de su época superaron todas las adversidades aportando riqueza no tan solo a la provincia sino al país”.
Jorge Alberto Cacciamani